La mejor manera de conocer los vinos bercianos es contestualizar un poco sus viñedos y sus uvas autóctonas, como por supuesto sus viticultores. Pueblos pequeños, como lo son también sus parcelas, pero ya nos decía el enólogo Raúl Pérez.
“Una pequeña parcela junto a otra. Pues los vinos que salen de cada una pueden ser totalmente diferentes”. El terruño juega un papel fundamental en estos vinos. Las variedades Mencía y Godello son las uvas autóctonas de la Denominación de Origen, aunque hemos catado fuera de la D.O. vinos con la variedad Gewürztraminer superlativos.
