Gracias a la labor de los profesionales del centro de investigación de González Byass, CIDIMA (Calidad, Investigación, Desarrollo, Investigación y Medio Ambiente) se ha podido recuperar esta variedad en el año 2006. Entonces, González Byass decidió realizar el cultivo de la Pedro Ximénez convirtiéndose en la primera bodega en dar este paso para volver a traer al Marco de Jerez una variedad de uva, que practicamente se había perdido.
En 2006 y 2007 se plantaron 27 hectáreas de Pedro Ximénez y, dado el éxito de la vinificación, la superficie se incrementó en 3 hectáreas más. Posteriormente se llevó a cabo la rehabilitación del antiguo lagar de vinificación en Viña La Canariera, donde se dejaron de elaborar “dulces” en 1986. Dicha labor se culminó en 2018, cuando tuvo lugar la primera vendimia de Pedro Ximénez dulce. De esta forma, en la D.O. Jerez se ha vuelto a recuperar la vendimia y vinificación de la PX.