Su nombre lo expresa sin rodeos, alma, la personalización en la copa del proyecto Alacer en Ribera del Duero del Grupo Bodegas Riojanas, para el que este vino representa el orgullo por su origen con identidad propia y por un entorno mágico.
Tras años de estudio, la casa con base en Rioja Alta se ilusionó con Vadocondes, este lugar especial situado a más de 900 metros de altitud, en la provincia de Burgos. En el año 2022 lanzó sus primeros tres vinos de Alacer. Ahora presentan Alma Alacer, con el que aspiran a demostrar la versión más nítida de la singularidad de la uva Tempranillo de este terruño.
Para lograrlo, de entre las 14 hectáreas de viejas cepas de la propiedad, eligieron Los Hoyos y Los Hontanillas, dos pequeñas parcelas seleccionadas por su ecosistema natural.
Plantadas a más de 900 metros, la combinación de altitud, suelos arcilloso-calcáreos y un clima extremo permite paliar los efectos del cambio climático y preservar la frescura de las uvas, que maduran lentamente.
Su PVP recomendado está en los 24 euros.
